Introducción
Los amenities son artículos de acogida que un hotel u otros tipos de alojamiento ponen a disposición de los clientes «de forma gratuita», con el objetivo de que mejore la experiencia en la estancia. Estos pueden ser, por ejemplo, zapatillas, albornoces, cepillos para el pelo, cepillos y pasta de dientes… En definitiva, todos aquellos accesorios o artículos que puedan necesitar los clientes y que mejore su experiencia.
Así mismo, los toiletries son los amenities específicos del cuarto de baño de la estancia, relacionados con la higiene personal. Pueden ser, por ejemplo, botellitas o sobrecitos de jabón, champú, acondicionador, cepillo de dientes, etc.
Generalmente, cuanto mayor es la calidad y el número de estos artículos, más excelente se considera el hotel. Sin embargo, no siempre ha sido así…
Los inicios de su uso
Aunque la práctica o disciplina de hospedaje se originó en la antigua Grecia, no fue hasta la Revolución Industrial cuando empezó el aumento y generalización de uso de estos establecimientos, ya que los nuevos medios de transporte permitieron a las personas desplazarse de forma masiva.
Sin embargo, el uso de cuartos de baño privado en los hoteles es bastante moderno debido a que no empezó a utilizarse hasta el siglo XX. Como consecuencia, con el inicio del uso de los cuartos de baño privados, comenzó la costumbre de ofrecer artículos de baño o toiletries en los hoteles.
Terminología: amenities y toiletries
El término amenities es en realidad un anglicismo, ya que existen otras terminologías en castellano que sirven como sinónimo. Podrían ser por ejemplo, productos o artículos de acogida. Este término se ha popularizado en el sector hotelero, incorporado a la jerga propia del mismo, seguramente por ser más corto y fácil de utilizar.
Lo mismo ocurre con el término toiletries, también un anglicismo incorporado a la jerga del sector.
La importancia del uso de los amenities
Los amenities han pasado a ser uno de los elementos clave, incorporándose a la propia estrategia de marketing del hotel, como elemento diferenciador y para lograr aumentar el recuerdo del hotel en los clientes. Y no nos extraña ya que el olfato desencadena recuerdos muy fuertes y hay estudios que indican que las empresas que utilizan el marketing olfativo logran que sus usuarios permanezcan un tiempo mayor en el establecimiento.
Además, los packs de bienvenida están muy bien vistos por los clientes ya que, entre otras cosas, les permite no tener que cargar con todos estos artículos en el equipaje y les hace sentir que el hotel se preocupa por ellos. Ello, a su vez, hace que el hotel aumente su reputación.
Es, por tanto, un valor añadido que aumentará la reputación del hotel, hostal, etc.
Algunos ejemplos:
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